Pena me da el uso que en ocasiones se les da a las redes sociales.
Puedo entender que un buen titular de una noticia o un post puede hacer que alguien te lea o no te lea, y entiendo que el trabajo de muchos periodistas, especialmente los becarios, depende precisamente de esto.
Pero creo que hay límites que no se pueden sobrepasar. Es decir, los canales informativos NO pueden servir para desinformar y alarmar. Ya este verano ocurrió con un post sobre al ahogamiento secundario que rápidamente se viralizó por las redes, y que yo también traté de poner cordura en este post.
Voy a intentar aclarar en muy pocas palabras que es lo que ha pasado en esta ocasión con lo de “las salchichas producen cáncer”
La Agencia Internacional para la investigación del Cáncer (IARC) es un grupo de laOrganizaión Mundial de la Salud (OMS) que se dedica a la clasificación los carcinógenos.
Esta clasificación establece, como veis en la siguiente imagen, diferentes grupos según la relación que se haya podido demostrar según los estudios que se hayan realizado sobre determinado producto cancerígeno. Por tanto, puede haber productos muy cancerígenos, pero si no hay estudios que lo avalen, NO aparecerán en ese grupo de la clasificación.
Que las carnes procesadas estén en le grupo 1 sólo significa que hay estudios que han relacionado la ingesta de ese tipo de productos cárnicos con algún tipo de cáncer, pero en ningún momento se habla de dosis en esta clasificación.
Así que el problema no es el producto en sí, sino la dosis. A nadie se le escapa que no es lo mismo fumar un puro en la boda de un amigo que fumar tres paquetes de tabaco al día, no es lo mismo dar un paseíto de media hora al sol a la caída de la tarde que achicharrarse repetidamente al sol, no es lo mismo tomar una copa de vino comiendo que beberse diariamente cinco wiskies.
Creo que la comunidad científica tenemos la obligación de decir la verdad, de informar: no hay ningún estudio científico que haya demostrado la carne procesada consumida con moderación produzca cáncer. No conoceréis a nadie que tenga un cáncer por haber consumido alguna vez una hamburguesa.
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