¿Y tú, estás arrepentida de ser madre?

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Me ha costado, pero tenía que hacerlo. Desde que leí el libro-reportaje de Orna Donath confirmé una intuición que yo había captado en ocasiones en mi trato diario con algunas familias en la consulta.

Sé que con este tema me meto en terreno pantanoso. Puede crear muchas susceptibilidades e incluso puede generar muchos malentendidos.

Desde el mismo momento que presione el botón “publicar” me voy a encontrar opiniones para todos los gustos pero creo que esta visión de la maternidad debe ser contada.

Al grano:

Pues tal y como expone Orna Donath en su libro #madresarrepentidas existen algunas madres tienen el sentimiento de culpa y arrepentimiento tras tener un hijo.

En el libro de esta socióloga se pueden leer los testimonios de 23 mujeres israelíes arrepentidas de ser madres. Hay que tener en cuenta que en ese país tener un hijo puede ser una deshonra. Pero la autora expone posteriormente que ese sentimiento va más allá de una determinada cultura o religión. Ese sentimiento es más común de lo que pensamos, tanto en mujeres como en hombres.

Dejo un ejemplo de uno de los testimonios del libro:

«Mis hijos son maravillosos, encantadores y lo que te dan es increíble. No desacredito eso. Ellos dan una dimensión a mi vida que de lo contrario no existiría. Pero ¿qué haría yo si pudiera retroceder en el tiempo sin sentir culpa ni todas esas ataduras? No elegiría este camino». – Debra, madre de dos hijos de entre 10 y 15 años.

En general, creo que cuando una madre se encuentra arrepentida, no es que sea un sentimiento de arrepentimiento por haber tenido ese hijo (o esos hijos) sino más bien el reconocer fuertemente que si pudiese dar marcha atrás no volvería a seguir ese camino.

Creo, en este sentido, que es la sociedad la que empuja en ocasiones a las mujeres a ser madres. Pareciera que la sociedad, para cerrar el círculo de la mujer perfecta, “obliga” a algunas mujeres a ser madres.

Ya hablé en su momento de “El precio de la maternidad”.

Algunas mujeres, casi siempre con aspiraciones profesionales muy altas (y esto que conste que no es una crítica, cada uno es muy libre de elegir lo que quiere hacer con su vida), ven truncada parcialmente su vida al tener que renunciar a parte de sus aspiraciones profesionales por ser madre, y después se dan cuenta que la maternidad no les aporta lo que ellas deseaban.

Este sentimiento puede ser experimentado tanto por hombres como por mujeres. Pero en un nuevo ejemplo del machismo en el que estamos inmersos sin darnos cuenta en esta sociedad será vivido de dos maneras muy diferentes en función del sexo. Si un hombre decide no tener niños no pasa nada, lo habrá decidido así y ya está, pero si es una mujer la que se plantea eso será cuestionada por no tener descendencia, esta “obligada” a ser una madre perfecta.

Yo, que estoy plenamente satisfecho con mi vida con mis tres hijos, y que a día de hoy no lo cambiaría por nada (no puedo imaginar mi vida ya sin ellos) entiendo que no todo el mundo lo vea así. Entiendo que la maternidad (paternidad) en algunas personas no acabe de cumplir las espectativas que esperaban y se sientan arrepentidos.

Creo que debemos desterrar este tabú y sacar este tema a la palestra.

¿Y tú qué opinas? ¿La sociedad “te obligó” a ser madre (padre)?

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