No puedo sonreírte esta noche…

abrazo

No, esta noche no puedo sonreírte cuando tú me provocas con tu sonrisa. No, no es fácil.

Hay noches, y hoy es una de ellas, en las que en tu mirada se me cruza la mirada de tantos y tantos niños que he visto sufrir.

He visto a muchos niños sufrir y otras tantas familias que esperan, como quien se agarra a un clavo ardiendo, una palabra de aliento, un gesto de esperanza,…

Tú me sonríes, ajena a ese sufrimiento, inocente, feliz,… y casi me siento culpable por verte sonreír.

Balbuceas y repites “pa-pá, pa-pá,…” Mirándome, sonriéndome,… Es inevitable no cogerte en brazos y achucharte. Pero al tiempo que te cojo pienso en cada una de esas madres que nunca pudieron escuchar ese “ma-má”. Pienso en todas esas madres que no pudieron nunca escuchar la voz de su hijo. La imaginaron. Sí, la imaginaron durante mucho tiempo pero nunca la escucharon. Y la sueñan. Sí, me contáis que habéis soñado con su voz. Y pienso, también, en esos padres que sufren porque tampoco escucharon ese “pa-pá”. No lo escucharon y eso me imagino que duele, duele mucho. Esos padres me cuentan que hubiesen conformado, al menos, con escuchar cómo dicen “ma-má”. Al menos eso les habría liberado de la parte de sentimiento de culpa por no haberle dado un hijo a esa madre como ella lo había soñado. A veces, sólo una mirada habría bastado. Pero no, en ocasiones ni esa mirada. No llegar a conectar nunca con la mirada de tu hijo es terrible.

Me comprometes, pequeña, para que te coja. Cuando te cojo te calmas. Sí, es fácil entenderte. Te comunicas muy bien. Eso me llena. Flujo recíproco de felicidad. Miradas con muchas complicidad con sólo nueve meses.

¡Cuánto se siente con un abrazo inocente, puro, verdadero, desinteresado,…!

Hoy quiero abrazar a todos esos niños que he conocido y cuyas familias sienten muchas dificultades para conectar con ellos

Miguel, Carmen, Mario, Carlota, Javier, Lucía, Aaron, Luis, Salvador, … y tantos otros que en muchos momentos, sin venir a cuento, cuando más tranquilo estoy, os cruzáis en mi mente . Un abrazo muy fuerte de mi parte.

Podéis estar seguros que vuestras familias os quisieron, os quieren y os siguirán queriendo infinito.

Este es mi homenaje a todos vosotros y a vuestras familias, por su lucha.

4 comentarios en «No puedo sonreírte esta noche…»

  1. Haceis un trabajo increible, ahora va hacer un año que tuve a mi hija ingresada en la UCI y te toco atendernos el segundo día y te agradezco a ti y a todos tus compañeros, pediatras y enfermeras por como nos tratasteis, sobre todo por el apoyo y la comprensión q nos disteis.

  2. Perder a un hijo es como si una parte de ti se fuera con el . Aún me imagino como seria mi niña y comparó con otros niños y mi otra hija como hubiese sido . Te quiero mi niña allí a donde estés!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *